Los remedios naturales caseros además de ser rápidos y económicos, pueden llegar a conseguir un resultado igual o incluso mejor que los productos que se venden en tiendas.
MASCARILLA REFRESCANTE
Mezcla medio vaso de yogur fresco con una cucharada de nata sin
azúcar y una cucharadita de fécula de patata.
Extiende en una capa de medio centímetro de grosor sobre la cara y sobre el
cuello y déjala reposar durante 30 minutos. Retira con papel, y se enjuaga el rostro con abundante agua tibia.
MASCARILLA PURIFICANTE
Un tratamiento quincenal con aguacate ayuda a retardar la aparición de arrugas,
hace desaparecer las incipientes y suaviza las ya existentes. El aguacate tiene
un fuerte poder regenerador.
MASCARILLA PIEL CANSADA
Bate una yema de huevo con una cucharadita de miel y añade una cucharada
de harina de avena. Aplica esta mascarilla durante una hora. Aclara luego con
agua fría.
MASCARILLA CONTRA LOS PUNTOS NEGROS
Mezcla polvos de talco y alcohol hasta conseguir una pasta. Aplica sobre el
rostro. Espera 45 minutos y aclara con agua templada y jabón.
MASCARILLA NUTRITIVA
Tritura un plátano y añade unas gotas de limón.
ANTIARRUGAS
Mezcla en una botella 30 ml de aceite de albaricoque, la misma cantidad de
aceite de almendras y de germen de trigo. Agita con fuerza y pon un poco de
líquido en la piel que rodee los ojos, la boca y el cuello.
También puedes aplicar rodajas de plátano en la cara y cuello o plátano
triturado.
Otra opción es mezclar la pulpa de una naranja con germen de trigo y
aplicar diariamente sobre la cara y cuello.
MASCARILLA HIDRATANTE
Corta en rodajas medio plátano y añade una cucharadita de nata. Tritúralo con un tenedor. La pasta obtenida se coloca sobre la piel unos 20 minutos. Quita cuidadosamente con una toalla. Los restos se quitan con una esponja empapada en agua fría. Se puede aplicar dos veces por semana.
