Para que los productos de belleza, como los tónicos o cremas faciales hagan su
efecto, se necesita saber lo más importante: Saber que tipo de piel tenemos.
Esto nos facilitará a la hora de comprar productos y nos ayudará a atacar el
problema con eficacia.
Piel normal
Frecuente en pieles jóvenes. Es
aterciopelada, tienes un brillo natural y es perfecta al tacto. No hay granos
habitualmente.
Piel mixta
Es el tipo de piel más común. Su zona grasa está en la zona T.
Es decir, la frente, entrecejo, la nariz y el mentón, mientras que su zona seca
son las mejillas.
Piel sensible
Es una piel fina y suave.
Es la más delicada ya que aparecen rojeces en las mejillas.
Las pieles a las que algunos productos químicos le alteran en la piel también se les pueden considerar como piel sensible.
Las pieles a las que algunos productos químicos le alteran en la piel también se les pueden considerar como piel sensible.
Piel seca
Es áspera, reseca y con finas
escamas desprendidas. A este tipo de piel le falta agua y grasa. La ausencia de
ellos puede ser a causa de del calor el frío.
También la causa puede ser de ciertos medicamentos .Las arrugas dependen de la hidratación.
También la causa puede ser de ciertos medicamentos .Las arrugas dependen de la hidratación.
Piel grasa
Es gruesa y tiene bastante brillo. Su color es
rosado-amarillento. Su grasa es excesiva. Se ensucian con facilidad porque los
poros están abiertos, por lo que se forman los puntos negros o granos.